lunes, 11 de febrero de 2008

Puesto que somos estudiantes, jóvenes y no tenemos mucha experiencia, en ocasiones si queremos realizar un viaje con nuestros amigos o nuestra pareja o simplemente comprarnos un capricho, o por un millón de motivos, somos cada vez más los que buscamos trabajos temporales y 'rápidos'. Yo, en concreto, decidí empezar a trabajar en una empresa de azafatas para ganarme un 'dinerillo' para los viajes con mis amigos. Lo decidí porque en este trabajo vi la ventaja de no estar atada a un horario y así poder continuar con la carrera como única prioridad y porque pensé que de algo me serviría para un futuro laboral ya más estable. Evidentemente son trabajos que no requieren mucho esfuerzo, pero sin embargo sí muchas horas. Y mejor no hablo de la remuneración, pues es bastante escasa. Trabajando como azafata me di más cuenta aún de la poca valoración que el resto de la sociedad concede a los jóvenes que trabajan en este tipo de actividades. Se exige un respeto hacia la población adulta, respeto que se enfatiza cuando se trata de la tercera edad y por supuesto lo defiendo. Sin embargo parece que a nosotros en muhas ocasiones, aunque no siempre, no nos corresponda el mismo respeto. La sociedad nos ha vendido como a la generación que ya ha nacido en La Era de la Información, y que ha tenido a su alcance desde muy pequeños todo tipo de comodidades. Desde aquí os planteo una cuestión, ¿somos más cómodos o realmente más trabajadores?

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